La paz social en el Valencia CF es completamente imposible visto lo visto, y los giros de rumbo de los acontecimientos son constantes y sorprendentes, ahora conocemos que el Estadio del Mestalla sobre el que recaía una Sentencia de orden de derribo judicial de parte de las nuevas gradas el Ayuntamiento entiende cumplida y caducada, por lo que este gran problema quedaría solventado para el Club.
Ayer mismo informaba Carlos Navarro, especialista en este tema, en el diario.es de este controvertido asunto.
La ampliación del viejo Mestalla y la Sentencia Judicial
La federación de AA.VV. de Valencia denunció al club tras las obras de ampliación del estadio, donde una de las gradas recae sobre la calzada de una calle que desapareció y una de las torres de evacuación que se iba a ejecutar sobre la acera, terreno público, y que por la polémica nunca se realizó . Además, las obras carecían de los aparcamientos necesarios, con lo que en 2002 un juzgado declaró las obras como ilegales y obligaba a demoler parte de lo ejecutado en la ampliación sobre terreno público.
Luego llegó la idea de construir un nuevo estadio, pero hace 15 años que la obra está parada, y ahí hubieron nuevos problemas jurídicos, ya que se declaró una ATE ( Actuación Territorial estratégica) por la Generalitat Valenciana para que la construcción gozara de determinadas ventajas, pero siempre se supeditó por el club de fútbol privado las obras a que posteriormente se derribaría el antiguo estadio y se recalificaban los terrenos para uso residencial y terciario.
Unos terrenos junto a las Avenidas de Aragón y Blasco Ibañez muy codiciados, ya que junto con los de los cuarteles cercanos de La Alameda son los últimos grandes terrenos por construir en la zona, y que reportaría elevados beneficios al club, con lo que afrontar los gastos de construcción del nuevo estadio.
Las administraciones públicas les dieron numerosas ventajas y cambiaron el planeamiento urbanístico (el PGOU) pero la crisis y después la crisis social del VCF han dado al traste una y otra vez con este macroproyecto.
El mundial de 2030
Ya sabemos que el mundial de Fútbol del 2030 celebrará la final en el Estadio Santiago Bernabéu en Madrid, pero Mestalla partía como favorito para acoger algunos de los partidos, pero las obras del nuevo estadio continúan paradas y el tiempo juega en contra.
Ayer se dio un nuevo giro de timón en los proyectos, ya que si bien la alcaldesa aseguraba que la orden de derribo de 2002 estaba sobre la mesa, ayer se reconoció que esa sentencia judicial estaba caducada y existe un informe jurídico municipal que asegura que mientras se estaba polemizando sobre ello, el Consistorio Municipal cambió el PGOU y las gradas ya estaría legalizadas, con lo que la orden judicial de derribo estaría caducada y entienden que han cumplido la sentencia al modificar el PGOU.
Esto pone al viejo estadio de Mestalla de nuevo en el centro de la polémica, sobre las obras del nuevo estadio. Así, el Club tiene un estadio de más de 100 años sobre el que se acometió una ampliación a medias y un estadio a medio construir a 3,63 kilómetros en línea recta, dos grandes problemas por solucionar.
¿Y el viejo Mestalla?
Cabe recordar los numerosos intentos por construir torres de viviendas sobre el actual campo de fútbol, unas viviendas de alto copete, situadas en una de las zonas más caras del Cap i Casal, pero el último intento no logró atraer compradores, con lo que no descarta la idea de mantener el actual estadio de Mestalla…pero se abre un nuevo problema…
El nuevo problema es que justo el club acaba de vender los derechos del terciario del nuevo campo de la Avenida de las Cortes Valencianas, con lo que de no construir allí el estadios e abriría un nuevo problema, y ante nuevos problemas, nuevas soluciones, y es que cabe recordar que bajo la grade del Mar que da a la Avenida de Aragón existe un esqueleto de un edificio, y una zona donde sís e podría construir este terciario, y así acabar con este sueño convertido en pesadilla del nuevo estadio del VCF.
Todo esto da para muchas negociaciones, y los actores principales en sí son un desastre, ya que ni el club ni las administraciones públicas implicadas se ponen de acuerdo en sí mismas de la postura a adoptar y las negociaciones se han convertido en un recreo de patio de colegio donde nadie se aclara de absolutamente nada.
Ahora tenemos un frente más, y habrá que esperar qué dice la federación Vecinal al respecto, que puede añadir más leña al fuego tras este cambio de rumbo. Ni series de Netflix, ni novelas turcas, la mejor novela de misterio, ficción y tragicomedia la tenemos en valencia, si ya de por sí la política valenciana se ha convertido en un circo, lo del VCF y sus estadios ya es de traca, del mejor guión de Berlanga de lo absurdo e incongruente, pero Valencia es la tierra de Berlanga, la de lo absurdo y extraño, la de los barroco y visceral, y no cambiamos con el paso de los años…
Para acabar de poner la guinda al pastel y acabar de liar más la madeja si fuera posible, el edificio de más de 100 años hay quién lo quiere declarar primero como BRL y después como BIC, lo que evitaría que fuera destruido, al menos el viejo estadio de Mestalla original de más de 100 años…
Si el chiste fácil decía eso de que «tinc el parrús com l’estadi del Valencia» y el otro decía eso de «¿de gran?» para contestar eso de «No, de que m’estalla«, pues ahora nos va a estallar la cabeza de tan semejante madeja de líos y problemas que no para de crecer sobre el Mestalla.