En los últimos días, la actualidad en Valencia ha estado marcada por la polémica generada tras la decisión de la Generalitat de rebajar el nivel de alerta por DANA en las localidades de Benetússer, Catarroja y Paiporta. Las autoridades locales han expresado su descontento y preocupación ante lo que consideran una medida prematura e inadecuada, dada la situación adversa y los efectos de las riadas del pasado 29 de octubre y sus efectos notables aún en muchos municipios.
Decisión de la Generalitat Valenciana con gran polémica en las poblaciones más afectadas
La Generalitat Valenciana anunció recientemente una rebaja en el nivel de alerta por DANA (Depresión Aislada en Niveles Altos) en varias localidades, incluyendo Benetússer, Catarroja y Paiporta. Esta decisión ha suscitado críticas por parte de los ayuntamientos locales, quienes consideran que las condiciones climáticas no han mejorado lo suficiente como para justificar tal decisión.
Reacciones de las autoridades locales
Los alcaldes y concejales de las localidades afectadas han manifestado su preocupación por la seguridad de los ciudadanos. Argumentan que la las condiciones climáticas extremas continúan representando un riesgo significativo para la población y los bienes materiales.
«Aún queda mucho por hacer pare recuperar la normalidad en las distintas poblaciones»
Impacto del DANA en las localidades afectadas
A pesar de la rebaja en el nivel de alerta, las consecuencias del DANA siguen siendo palpables. Las lluvias torrenciales han causado daños materiales y alteraciones significativas en la vida diaria de los residentes. Las autoridades locales están trabajando arduamente para mitigar los efectos del temporal y garantizar la seguridad de todos los ciudadanos. Siguen esperando una conversación más fluida para la reconstrucción y sienten muchos de ellos que la Generalitat Valenciana, o al menos el vice-presidente Gan Pampols no cuneta con ellos.
Muchos bajos comerciales siguen sin abrir, muchos patios de viviendas carecen aún de puerta de acceso, y existen garajes aún impracticables, pero Gan Pampols ha decidido que vuelvan a la normalidad jurídica, algo incomprensible en muchos casos.
Medidas adoptadas por los ayuntamientos
Los ayuntamientos de Benetússer, Catarroja y Paiporta han implementado una serie de medidas para enfrentar las inclemencias del tiempo. Estas acciones incluyen el despliegue de equipos de emergencia adicionales, así como campañas informativas para mantener a la población al tanto de las condiciones meteorológicas.
- Refuerzo del personal de emergencias para atender incidencias.
- Instalación de bombas de agua para prevenir inundaciones mayores.
- Comunicación constante con los servicios meteorológicos para obtener actualizaciones precisas.
Perspectivas futuras y recomendaciones
Las autoridades locales continúan monitoreando de cerca la situación meteorológica y están listas para tomar medidas adicionales si es necesario. Se recomienda a los ciudadanos que sigan las indicaciones oficiales y tomen precauciones para protegerse a sí mismos y a sus propiedades.
A medida que el clima sigue siendo impredecible, es crucial que tanto las autoridades como los residentes permanezcan vigilantes y preparados para cualquier eventualidad. La coordinación entre los diferentes niveles de gobierno será esencial para garantizar una respuesta eficaz ante futuras emergencias climáticas.
Con esta situación aún en desarrollo, es fundamental que los ciudadanos se mantengan informados sobre las últimas noticias, especialmente aquellas relacionadas con el clima y las medidas adoptadas por las autoridades locales. La seguridad y el bienestar de todos dependen de una respuesta coordinada y efectiva ante estos desafíos climáticos.
Las obras previstas hace 10 años para prevenir inundaciones siguen en el cajón
Mientras esperan las obras que mitiguen los efectos de las riadas, y ven con preocupación cuando se cumplen 5 meses de las riadas muchas cosas quedan por hacer.
Cabe recordar que las obras de mitigación de riadas, perfectamente definidas por la Confederación Hidrográfica del Júcar fueron presupuestadas ahora hace más de 10 años en más de 200 millones de euros, el Ministerio de Transición Ecológica lo dividió en 7 lotes y ninguno de ellos 10 años después ha sido ejecutado.
Los expertos han incidido que en los últimos 10 años la inversión en infraestructuras hidrológicas en la provincia de Valencia para mitigar inundaciones por parte del Gobierno ha caído un 70%, lo que ha contribuido a aumentar los riesgos en caso de riadas, tal y como se comprobó el pasado 29 de Octubre.
Hoy la CHJ limpia el Barranco del Poyo, en sus cerca de 70 kilómetros de extensión y ha destinado para ello sólo 12 millones de euros a pesar de los graves daños en sus laderas en muchas de las poblaciones, y la acumulación de sedimentos en su cauce que ha hecho aminorar su capacidad.
¿Traslado de infraestructuras o obras de mitigación de riadas?
Éste es un debate abierto, pero la pregunta que surge después es ¿cómo trasladar infraestructuras de más de 50 poblaciones?. En las zonas inundables viven más de 300.000 valencianos, lo que hace imposible el traslado de viviendas e infraestructuras. Para ello sólo cabe la solución de ejecutar obras hidráulicas de laminación de riadas y de desvío de cauces. Hace más de 10 años la solución estaba sobre la mesa, pero el Ministerio de Transición Ecológica guardó los proyectos que ahora siguen ene le cajón.
vendrá octubre y las lluvias y las nuevas #DANAS y aún quedará mucho por hacer, ese es el miedo de ayuntamientos y de vecinos afectados, que ven como las Instituciones no solventan el problema.