Los vecinos de Ayora reclaman al Ajuntament de Valencia mejoras en jardinería y limpieza. En la plaza Javier Goerlich tras la larga lucha vecinal que mantuvieron los vecinos de la plaza contra el Ayuntamiento en pasadas legislaturas, desde hace 4 años todo sigue igual. Los vecinos siguen esperando la reurbanización de la plaza interior donde apenas quedan media docena de árboles de gran tamaño. Desde Agosto pasado el servicio de jardinería cortó uno de ellos que había caído y los restos del árbol desde agosto pasado están en el paqrue esperando ser retirados. Hace más de dos meses.
Los alcorques de la zona siguen llenos de malas hierbas y algunos sin arbolado. Las zonas ajardinadas necesitan un buen cuidado, únicamente los vecinos aseguran que se mantiene el parque de Ayora pero recuerdan que desde hace 5 años que cayó un ficus de gran porte y sigue en el interior del parque tirado en el suelo.
Los vecinos aseguran que no han percibido la mejora del servicio de jardinería llevada a cabo por el actual gobierno y añaden que siguen estando esperando tras el olvido al que han estado sometidos los últimos años del gobierno de Ribó y Sandra Gómez. La poda de palmitos son otra de las reivindicaciones de los vecinos que no se ha efectuado en años.
Recordemos que el Jefe del Servicio de Jardinería Sostenible municipal es un cargo de confianza y Ribó eligió a Antonio Pardiñas, Presidente de la catalanista Coral El Micalet, que celebra cada año la política fiesta de las magas republicanas y destacado miembro de Compromís.
Este sujeto sigue en su cargo (al menos el fin de semana pasado seguía estando como Jefe de Jardinería municipal, y ni Catalá ni Badebas lo han destituído aún).
El nuevo concejal de Parques y Jardines, que tomó hace una semana posesión de su nuevo cargo, Juanma Badenas deberá ponerse literalmente «las pilas» con una concejalía que sigue sin funcionar y que sigue generando quejas de los vecinos.
Deberá para ganarse la confianza de los vecinos dar la vuelta literalmente a la concejalía y tomar la sartén por el mango, de un problema que desde hace años está pendiente de solución.
El anterior gobierno comandado por Ribó y cuyo concejal era el bilólogo Sergi Campillo decidió no actuar y dejar una «naturalización» bajo la premisa de no actuación, algo que generó las quejas constantes de los vecinos por la cantidad de suciedad acumulada. Ahora deberá trazar Badenas una nueva estrategia.