Cada 8 de marzo, Día Internacional de la Mujer, se alza la voz para reivindicar derechos fundamentales y exigir la erradicación de la discriminación.
Sin embargo, dentro de esta lucha:
es crucial poner el foco en aquellas mujeres que enfrentan una doble discriminación, como es el caso de las mujeres con discapacidad
La igualdad real solo será posible si se garantiza su empoderamiento y plena participación en la sociedad.
Las mujeres y niñas con discapacidad viven una situación de vulnerabilidad agravada, ya que sufren discriminación no solo por razones de género, sino también por su condición.
Este escenario limita sus derechos y oportunidades, impidiendo su acceso a la educación, el empleo y la vida social en igualdad de condiciones.
Los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) de Naciones Unidas plantean grandes desafíos, y su cumplimiento solo será posible si estas mujeres son reconocidas como protagonistas del cambio.
Este documento enfatiza la urgencia de proteger los derechos de las mujeres frente a cualquier forma de discriminación y alerta sobre los desafíos actuales en materia de igualdad.
Un avance legislativo en España para transformar el lenguaje
En España, un hito importante fue la reforma del artículo 49 de la Constitución, que representó un gran avance en el reconocimiento de los derechos de las personas con discapacidad.
Este cambio supuso la eliminación de un enfoque peyorativo y colocó a estas mujeres como titulares de derechos, transformando el lenguaje y la percepción social.
El lenguaje no es solo una herramienta de comunicación, sino también un reflejo de la mentalidad colectiva.
Modificar términos y conceptos equivale a ampliar la mirada social, contribuyendo a la eliminación de estereotipos y promoviendo una verdadera inclusión.
Las mujeres con discapacidad no deben ser definidas por su condición, sino reconocidas por su capacidad y derechos.
El camino hacia la igualdad es largo, pero cada avance legislativo, cada reforma social y cada lucha colectiva acercan a las mujeres con discapacidad a un futuro más justo e inclusivo.
30 años de la Declaración de Beijing: avances aún pendientes
Considerado el plan más progresista que jamás ha existido para promover los derechos de la mujer, la Declaración y la Plataforma de Acción de Beijing ha sido reimpresa en esta edición especial que también incluye una copia de la declaración política alcanzada en el 23º período extraordinario de sesiones de la Asamblea General en 2000, donde se revisó el progreso hacia la Plataforma de Acción cinco años después de su adopción.
Uno de los principales ejes del manifiesto de la entidad, es precisamente la conmemoración del 30º aniversario de la Declaración y Plataforma de Acción de Beijing, un hito clave que puso sobre la mesa la necesidad de garantizar los derechos de las niñas y mujeres con discapacidad y fomentar su participación en la sociedad en condiciones de igualdad.
Sin embargo, a pesar de los compromisos adquiridos por 189 países, estos objetivos aún no se han cumplido en su totalidad.
Preocupación por el retroceso en igualdad
CEMUDIS denuncia que la vulneración de los derechos de las mujeres sigue siendo una realidad persistente.
En este sentido, advierte sobre la normalización de la desigualdad en el acceso a la justicia, donde continúan existiendo prejuicios que afectan a la protección de sus derechos fundamentales.
Además, la entidad muestra su inquietud ante el crecimiento de discursos de odio promovidos por sectores con gran poder de persuasión, lo que podría traducirse en un preocupante retroceso en los avances logrados en igualdad de género.
Inteligencia Artificial y brecha de género
Otro punto clave del manifiesto es la escasa presencia de mujeres en el ámbito tecnológico, particularmente en el desarrollo de Inteligencia Artificial (IA).
Según datos de CEMUDIS, solo un 12% del personal investigador en IA y un 6% de quienes se dedican a la programación son mujeres.
Esta falta de representación contribuye a que los sesgos sexistas se trasladen a las nuevas tecnologías, reforzando la discriminación interseccional que enfrentan las mujeres y niñas con discapacidad.
Hay que considerar el impacto de la desinformación y los deepfakes ligado al desarrollo de la IA, lo que se traduce en una normalización de la violencia.
Manifiesto
Este esquema organiza los puntos clave del manifiesto para facilitar su comprensión y aplicación:
1. Garantía de derechos y financiación
- Medidas reales y financiación para garantizar leyes centradas en la realidad de mujeres y niñas con discapacidad.
- Impulso de cambios normativos para mejorar y proteger sus derechos.
- Supervisión internacional del cumplimiento de políticas sobre discapacidad.
2. Acceso a la justicia y protección contra la violencia
- Formación especializada en igualdad para jueces y fuerzas de seguridad.
- Accesibilidad universal en la justicia y servicios de atención (presencial, telefónica y digital).
- Control y protección frente a nuevas formas de violencia, especialmente digital.
3. Educación, formación e inclusión laboral
- Apoyos y ajustes para la formación y futura inclusión laboral.
- Inclusión de cursos de nuevas tecnologías en formaciones regladas y no regladas.
4. Autonomía personal y vida independiente
- Promoción de la autonomía basada en los deseos y demandas de cada persona.
- Financiación para sistemas que impulsen la independencia de mujeres con discapacidad.
5. Visibilización e investigación
- Consideración del indicador de género y discapacidad en estudios, medidas y políticas públicas.
- Campañas de sensibilización para una representación real y normalizada.
6. Seguridad digital y prevención de la violencia digital
- Creación de entornos digitales seguros con regulación de contenidos.
- Formación sobre violencia de género digital para su identificación, prevención y denuncia.
- Protocolos de actuación frente a la violencia digital con procesos de evaluación y denuncia.
7. Sensibilización y empoderamiento
- Educación en igualdad desde un enfoque interseccional.
- Potenciación de entidades que trabajan con mujeres para su empoderamiento.
Reivindicar se cumpla lo ya acordado es el objetivo de CEMUDIS que trabaja incansablemente para que los derechos de las mujeres con discapacidad no sean constantemente vapuleados.